Se trata de la comunidad educativa del Instituto Superior de Arte N° 2 “Hermógenes Cayo” que supo adaptar a la virtualidad la forma de trabajo que venían realizando, con el propósito de continuar con las experiencias pedagógicas enriquecedoras logradas en el cursado del profesorado de Artes Visuales de Humahuaca.

A partir de la propuesta del proyecto “La Inscripción Institucional del Estudiante en el Nivel Superior” de la docente Griselda Mamaní, quien trabaja “ad honorem” en la Institución, en el año 2019 el Instituto comenzó a brindar tutorías pedagógicas abiertas presenciales con el objetivo de construir una Comunidad de Estudio para consultas y acompañamiento a los estudiantes de los últimos años.

Durante los encuentros presenciales, la reflexión colectiva y el abordaje de temas relacionados al acceso o la permanencia del estudiantado, permitieron visibilizar los logros académicos y acompañar al estudiante en espacios de participación e inclusión, a la vez hacer hincapié en la preparación de los docentes para los escenarios actuales y egreso de los estudiantes.

“A través de estos encuentros las polifonías de las voces de los estudiantes eran escuchadas, convocándolos para que tomen la palabra y hacer uso de los conocimientos que han aprendido”, expresó la docente al admitir la importancia de darle continuidad a estas experiencias positivas.

A raíz de la pandemia mundial y la emergencia de la educación a distancia mediada por entornos virtuales, nuevos desafíos se presentaron obligando a innovar en las formas de acompañamiento y comunicabilidad que posibiliten la continuidad del proyecto.

La docente explicó que las propuestas didácticas del formato aula debieron rediseñarse e incluir las TIC para crear un nuevo espacio de participación al cual denominaron “Aula Ampliada”, donde a través de aplicaciones simples como WhatsApp y la Radio Clase Artística, realizan las tutorías, ahora en formato seminario virtual, de dos espacios curriculares: Análisis de las Instituciones Educativas y Práctica Intervención Didáctica del plan de estudios.

“Es un lugar donde nos contactamos tres veces por semana durante dos horas y compartimos información a través de audios, imágenes, videos, presentaciones Power Point y documentos digitalizados (…) el beneficio de estas aulas virtuales es la manera de continuar con la escuela abierta y presente”, agregó Mamaní.

“Para todos es una experiencia nueva, tuvimos que resignificar la tarea docente del profesor presencial al profesor virtual, determinar los contenidos más significativos y elaborar las actividades de manera muy cuidadosa, rediseñar una nueva arquitectura y una nueva metodología tecnológica y dejar a disposición el contenido en formato virtual y papel”.

La docente comentó que no fue simple la adaptación para los estudiantes, “tuvimos que alentarlos para que se animen a hablar; y todas estas estrategias tienen otro ritmo muy variable, otro tiempo de espera, de escucha, de turnos para la interacción y que sea igualmente participativa”.

Con respecto a los exámenes y la manera de evaluar informó que se están desarrollando de manera positiva y explicitó que cada tribunal define por qué medio se lleva a cabo el examen virtual, en relación expresó que “los estudiantes manifestaron que esta nueva modalidad les generó nervios y temor ante la posibilidad de inconvenientes surgidos a raíz de la conectividad.

Al finalizar la docente manifestó su regocijo de poder continuar con el servicio educativo ad honorem como devolución a la comunidad en la cual aprendió a leer y escribir “realizo esta actividad para transmitir cultura, para pasar alfabetización académica, y ojalá pronto podamos hacer seminarios de debates con aquellos problemas a resolver para interpelar el desempeño del profesional docente y trabajar esta nueva pedagogía para que esté a la altura de la cultura contemporánea, incluyendo debates a través del cine, literatura, pintura y otras experiencias”.