El Consejo Federal de Educación realizó su primera Asamblea Virtual en la que se estableció un criterio federal para la evaluación del proceso de enseñanza y aprendizaje en el contexto de la pandemia y se acordó que no habrá calificaciones numéricas, respeta las particularidades y autonomías provinciales. La evaluación formativa de los estudiantes se centrará en el acompañamiento, seguimiento, registro y devolución a familias y alumnos de la marcha del aprendizaje. El propósito de este tipo de evaluación es orientar mejor los procesos de enseñanza aprendizaje, teniendo en cuenta que se desarrollan en condiciones muy heterogéneas y desiguales.
Se resolvió que a partir del 26 de mayo, se hará por única vez la prueba Aprender bajo la modalidad de relevamiento para encuestar las condiciones de la educación en la pandemia, denominada Evaluación Nacional del Proceso de Continuidad Pedagógica cuyos resultados serán dados a conocer en julio.
La ministra Isolda Calsina manifestó que “es importante asegurarnos que se garantice el derecho a la educación de todos los estudiantes, por lo tanto esta muestra que se realizará con la colaboración de UNICEF y será representativa del vínculo pedagógico de docentes y alumnos, y de la experiencia de aprender en casa desde la mirada de la escuela y la familia”.
Participaron de la reunión los ministros de Educación de las 24 jurisdicciones del país, el gabinete del Ministro Trotta, representantes del Consejo de Rectores de Universidades públicas y privadas, miembros de la Comisión de Educación del Parlamento, y representantes de las centrales sindicales docentes.
“Todas las provincias acordamos avanzar en la confección de los protocolos para el regreso a las aulas, en la medida en que las condiciones sanitarias lo permitan, y según las particularidades de los contextos provinciales” dijo finalmente la ministra Calsina.